[:es] La fortaleza del petróleo sigue sin dar un respiro al riesgo país[:]

[:es]El valor internacional del crudo siempre fue un baremo de peso para evaluar la solvencia de ingresos de Ecuador y su nivel de riesgo ante el mercado financiero internacional. Pero esta semana, en la que el barril de petróleo superó por primera vez desde 2014 la barrera de los $ 70, demostró que ha dejado de ser lo suficientemente fuerte para mejorar este índice de confianza. Solo este año el riesgo país subió 311 puntos.

Ayer ese indicador alcanzó los 759 puntos, nivel parecido al que Ecuador obtuvo en junio de 2017, cuando había expectativa por el inicio de la gestión del Gobierno de Moreno, pero también preocupación por los bajos ingresos petroleros. En ese entonces, el WTI (de referencia para Ecuador) alcanzaba apenas los $ 45. Hoy, aunque el país demuestre la posibilidad de mejorar sus rentas, tiene un escenario más complicado y, por ello, el crudo ha pasado a un segundo plano, dice Jaime Carrera, secretario del Observatorio de la Política Fiscal. “Los mercados perciben que las cuentas públicas (con una deuda que según el último informe de Contraloría supera los $ 60.000 millones) son insostenibles y que hay el riesgo de que Ecuador no pueda hacer pagos futuros”. No solo que el país tiene un impedimento legal para adquirir nueva deuda, sino que el acceso a financiamiento se agota de a poco. “Y eso es algo que están percibiendo los mercados”.

En declaraciones para medios públicos, la ministra de Finanzas, María Elsa Viteri, reconoció el alza de este indicador que, según indicó, está relacionado con temas sensibles para el mercado. Para ella, “una declaración trascendental de un funcionario, como el contralor o procurador, puede significar enormes contratiempos para el país y no solo para la administración pública”.

Pero para Mauricio Pozo, exministro de Finanzas, esta desconfianza no se genera por transparentar las cifras de endeudamiento, tal como lo hizo hace un mes la Contraloría, sino por la falta de medidas concretas para corregirlo. El plan económico que el Ministerio de Finanzas entregará esta semana a la Asamblea “no convence a los mercados”.

Pozo, sin ambages, se atreve a decir que la gestión de Viteri está incidiendo en la mala percepción. Afuera, señala, no solo se la recuerda como la funcionaria que declaró la moratoria de deuda en 2008, sino que se la cuestiona por lo poco que ha hecho para empezar a corregir el problema fiscal.

“Se habla de austeridad, pero el gasto de sueldos sigue creciendo. El tamaño del Estado pasó desde el 2007 a la fecha del 21 % al 40 %. Eso en valores significa $ 20.000 millones, pero el anuncio del Gobierno es que va a reducir solo mil por año”.

Expertos como José Orellana, asesor empresarial en finanzas, insisten en la urgencia de empezar a corregir las finanzas públicas para asegurarse nuevos ingresos. Él recuerda que buena parte del crudo ya se ha comprometido con las preventas y bajo un precio de referencia que no es el WTI.

En eso coincide Pozo, quien acota que solo este año se requerirán $ 10.000 millones para cubrir las necesidades fiscales. Para conseguirlo, dice, se debe optar por elevar el techo legal que impide al país endeudarse por encima del 40 % del PIB.

Pero antes de destrabar ese proceso, aclara, se debe crear un programa que contenga reales acciones que ayuden a enviar un mensaje positivo a los mercados. “Yo no veo forma de reducir el riesgo país en las actuales circunstancias sin un acuerdo con las multilaterales. Hay que replantear la deuda. Reemplazar la deuda cara por una barata”

FUENTE: DIARIO EXPRESO (EC)[:]

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