El documental The Last Dance sigue dando de qué hablar, y eso que en el documental que se quedaron fuera grandes anécdotas de la carrera de Michael Jordan como la que explica su director
El documental ‘The Last Dance’ sigue siendo lo más comentado. Los dos primeros capítulos suscitaron numerosos elogios y alguna crítica, pero la realidad es que nadie quedó indiferente. Y eso que en el documental que emiten ‘ESPN’ y ‘Netflix’ se quedaron fuera grandes anécdotas de la carrera de Michael Jordan. El director del documental, Jason Hehir confesó que tras analizar miles de horas de material inédito del vestuario de los Chicago Bulls y charlas con los protagonistas, se quedaron fuera de los 10 capítulos programados muchas anécdotas increíbles.
«Me hubiera encantado meter otra pequeña anécdota, pero teníamos que contar una historia en concreto y debía ir de la mano de aquella temporada 1997/98. Había que recortar de algún lado», explicó en el programa ‘The Dan Le Batard Show with Stugotz’. El director desveló que Jordan recibió ayuda con las estadísticas para ingresar a un campus de talentos en su etapa en el High School y que para poder costear esas semanas tuvo que trabajar como camarero de sus contrincantes.
«Era la etapa de su crecimiento entre su segundo año y el último allí, y su entrenador del High School lo metió en un campus de talentos 5 estrellas mintiendo con sus estadísticas. Adornó sus números simplemente para que pudiese entrar, porque Michael no estaba para nada en el radar de los ojeadores, nadie iba a ir hasta Wilmington, North Carolina, para ver a chicos de high school. Estuvo allí una semana porque era el tiempo que sus padres podían pagar, y le fue tan bien que acabó siendo el MVP del campus», comentó Hehir.
Gracias a ese falseo, Jordan pudo seguir creciendo en el baloncesto y medirse con algunos de los jóvenes más prometedores de la época, como Patrick Ewing, número uno del draft de 1985 y una de las figuras históricas de los Knicks, o Len Bias, archienemigo de Jordan en la Universidad, quien acabó muriendo por sobredosis de cocaína a los 22 años tras ser elegido por los Boston Celtics con el número dos en el draft de 1986.
El director del documental explicó cómo pudo seguir Jordan en el campus sin tener medios económicos para hacerlo: «En el campus estaban, entre otros, Patrick Ewing y Len Bias, pero Michael, Mike en ese momento, los superó a todos. Le rogaron para que se quedara por una segunda semana porque los entrenadores universitarios querían verlo, y sus padres dijeron que no podían pagarlo. Y en el campus dijeron ‘le pagaremos la estancia nosotros si trabaja en la cocina y como camarero para el resto de los chicos’. Michael fue el MVP de la segunda semana, siendo camarero y sirviéndoles fruta y queso a la parrilla para luego salir y superar a esos chicos en la cancha», terminó Hehir en una anécdota que seguro podría haber entrado en el documental que tanto éxito está teniendo mundialmente.
Un éxito de audiencia
Los dos primeros episodios de ‘The Last Dance’ se convirtieron rápidamente en historia de la televisión batiendo récords de audiencia gracias a las confesiones más íntimas del jugador. La cadena estadounidense hizo públicos los datos de audiencia revelando que más de seis millones de personas vieron el documental a través de ‘ESPN’. La propia cadena informó que había logrado cifras que nunca se habían registrado con un programa deportivo, sin contar los partidos.
Los dos primeros capítulos se centraron en su llegada a los Bulls y el mal ambiente que se encontró en el equipo. «Un circo de drogas y mujeres», definía. La serie llegó a ser Trending Topic mundial y 25 de las 30 tendencias en Estados Unidos estaban relacionadas con el programa que también generó más de nueve millones de interacciones en redes sociales. Además ‘The Last Dance’ fue la búsqueda principal en Google en los Estados Unidos durante la noche de su estreno.
FUENTE: DIARIO EL CONFIDENCIAL (ES)