El dilema de gastar o invertir. Buenas prácticas ganaderas y bienestar animal

La disminución de la ganancia de peso vivo diario (GPVD) en animales confinados en corrales, con distinta cantidad de barro, puede ser del 7 al 30%, pudiendo llegar al 50%, si se considera el aumento de los requerimientos necesarios para poder movilizarse en el fango, para poder llegar al comedero y al bebedero.

Una empresa no puede darse el lujo de perder. Todo proyecto que se emprenda necesita contemplar la implementación de normas de Buenas Prácticas Ganaderas (BPG) y la adopción de pautas de Bienestar Animal (BA), para lograr un sistema eficiente de producción.

Siguiendo este razonamiento, se puede evaluar cuánto se deja de ganar por no considerar la incorporación de las variables de las BPG y el BA al planificar el negocio.

Por ejemplo, tomando 150 animales encerrados un corral, previendo una GPVD de 1,250 Kg; a la que se le asigna un valor de $ 148,66 según (Índice Novillo Mercado de Liniers (INML) de agosto 2021, se obtiene una ganancia diaria de $ 185,83.

Si se establece una pérdida del 20% de GPVD como consecuencia de las condiciones de barro en los corrales, se dejan de ganar 0,250 Kg/Cab/ por día.

Si se estima que un 30% de animales se verán afectados por esta situación, habrá 45 cabezas dejando de ganar kilos.

Poniéndole números a esta suposición, se dejan de ganar $ 1.672,43 por día, con lo que se infiere que la merma de ganancia mensual será de $ 50.172,90.

Para asignarle mayor exactitud a este planteo habrá que agregarle el costo de la ración que hay que desechar, ya sea porque no se consumió o se tuvo que descartar porque se deterioró.

En conclusión, se deja de ganar cuando no se planifica correctamente el negocio. La construcción de un piso de cemento para los comederos y bebederos justifica la inversión. SE PAGA CON LO QUE SE DEJA DE GANAR.

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