La revisión de leyes tributarias y laborales, capacitación, campañas educativas y conectividad son otros factores que el ecosistema requiere.
El comercio electrónico crece a pasos agigantados en la región y Ecuador no es la excepción. Sin embargo, aún afronta algunos desafíos para una mayor dinamización.
La Cámara Ecuatoriana de Comercio Electrónico (CECE) estima que en 2019 se facturó algo más de $ 1.200 millones. La cifra sería $ 200 millones superior a lo registrado en 2018 en todas las plataformas de pago. Para 2020 se espera un monto cercano a los $ 1.500 millones.
Uno de los principales desafíos es “lograr una mejor conectividad para que más personas tengan acceso a menor precio”, indicó el presidente de la CECE, Leonardo Otatti.
Según datos del Ministerio de Telecomunicaciones, cuatro de cada 10 ecuatorianos tiene acceso a un smartphone y esa misma porción cuenta con internet en su hogar. Mientras que una de cada 10 personas tiene una computadora portátil y cinco de cada 10 acceden a la tecnología 4G. Los objetivos de la estrategia Ecuador Digital es justamente mejorar estos indicadores de conectividad.
Otro punto importante para el desarrollo del comercio electrónico son las normas tributarias y laborales. “Específicamente en temas de market place (sitio web donde compradores y vendedores interactúan) para entender la nueva economía”, indicó Otatti.
A su criterio, la actual legislación del país “no considera a la nueva economía”. Se requiere que las plataformas estén más regularizadas para que incluso aporten con ingresos para el Estado.
Adicionalmente a los temas legales, otra necesidad del sector son las campañas en conjunto de promoción “para que el consumidor entienda que comprar on line es seguro”, afirma el representante de la CECE.
El estudio “Comportamiento de las transacciones no presenciales en Ecuador 2018” indica que el miedo y la desconfianza todavía son las principales razones para no comprar en línea.
El gerente general de Echopex, Reimundo Martínez, agrega que también hay que atacar el desconocimiento de los métodos de pago, como depósitos bancarios, transferencias, pagos contra entrega, tarjetas de crédito, entre otros. Y no temer a las compras electrónicas en otras partes del mundo.
Echopex es un operador logístico que facilita la compra desde el exterior, especialmente en EE.UU., y recientemente realizó una alianza con eBay para ampliar su oferta de productos.
Martínez además cree que otra gran limitante para las empresas es la falta de capacitación en el uso de estas plataformas para comprar productos más baratos en EE.UU. y otras regiones. “Estas evitan mantener grandes inventarios que generan costos financieros, pérdidas por obsolescencia, robos, daños, entre otros”, comenta.
Por otra parte, el empresario cree que es necesario contemplar la baja de aranceles en productos que se adquieran en línea que en promedio pesen 3 kg y no cuesten más de $ 150, como insumos o repuestos para vehículos. “Ecuador cobra una tasa de $ 42 a los paquetes que están en la categoría B (4×4)”.
Para potenciar las ventas en 2020, entre las tendencias de las marcas internacionales se encuentran diseñar plataformas personalizadas para cada tipo de teléfono, incluir videos o experiencias de realidad virtual para promocionar productos y habilitar la búsqueda por voz en las plataformas.
Fuente: EL TELEGRAFO (EC)