Biess aplicará diferimientos de pagos de hipotecarios que no han sido cancelados durante emergencia por coronavirus

El Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess) aplicará el diferimiento de las cuotas a créditos que no pudieron ser pagados durante la emergencia sanitaria a causa de la pandemia del coronavirus COVID-19.

Esto lo dio a conocer en una entrevista el presidente del Consejo Directivo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Jorge Wated, el último miércoles.

«El Biess también va a tener que utilizar el mecanismo de diferimiento de pago a todas las personas que han recibido créditos hipotecarios, quirografarios, etcétera», manifestó en Ecuavisa.

De acuerdo a información de Diario El Comercio, en la resolución 603 se estableció que los pagos que no se realizaron entre marzo y junio se trasladen al final de la tabla del crédito.

La disposición sexta de la Ley Humanitaria señala que el directorio del Biess «emitirá las resoluciones o ejecutará las acciones necesarias que permitan garantizar la suspensión y refinanciación de las cuotas mensuales de los préstamos hipotecarios que mantienen los afiliados, jubilados y beneficiarios de montepío a la seguridad social, basadas en los informes técnicos que garanticen la solvencia y liquidez de los fondos correspondientes».

Además que por solicitud del afiliado, jubilado o beneficiario de montepío, que perdió el empleo durante la crisis sanitaria o tenga una reducción de su capacidad de pago, «se establecerá la suspensión del cobro del préstamo hipotecario y se establecerán los mecanismos de refinanciamiento correspondientes, que se podrá realizar por única vez por el tiempo de los meses de marzo, abril, mayo y junio de 2020. Esta suspensión de pago de cuotas no generará intereses o multas».

Hasta el momento la entidad no ha difundido el proceso para acceder a este proceso. Sin embargo, el pasado 4 de julio, a través de redes sociales, le indicaron a un beneficiario de crédito hipotecario que puede solicitar el refinanciamiento a través del solucionesdepago@biess.fin.ec si los ingresos disminuyeron. (I)

FUENTE: EL UNIVERSO

Déficit del 80,5% de ambulancias en Quito

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) una ciudad necesita tener una ambulancia por cada 25.000 habitantes. Bajo esta norma, Quito debería contar con 103 ambulancias; sin embargo, tiene 20. A nivel nacional pasa lo mismo: hay 443, cuando lo óptimo serían 680. Esto quiere decir que en el país hay un déficit del 34,8% y en la capital del 80,58%.

Por la emergencia sanitaria, el ECU-911 puede recurrir a ambulancias del sistema de salud privado o de instituciones que no trabajan de la mano con el sistema de salud, como la Policía Nacional.

Según el Registro Estadístico de Recursos y Actividades de Salud de 2018, del Instituto Ecuatoriano de Estadísticas y Censos (INEC), las ambulancias de todas las instituciones del país, entre públicas y privadas, suman 808.

“El déficit dificulta la pronta atención, más aún durante una emergencia sanitaria”, dice Santiago Carrasco, presidente de la Federación Ecuatoriana de la Salud, quien critica que la corrupción en los diferentes regímenes ha impactado negativamente en la adquisición de insumos “básicos para la estructura del sistema sanitario”.

Articulación institucional

Cuando un ciudadano tiene una emergencia y, de ser el caso, necesita una ambulancia llama al ECU-911.

El director de la entidad, Juan Zapata, aclara que la función del organismo es responder a la llamada y articular hacia la entidad competente. En el caso del envío de ambulancias se trabaja con el Ministerio de Salud (MSP), el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), la Cruz Roja y los Bomberos.

“El responsable del recurso es la institución articulada (…). La institución no es dueña ni de los patrulleros ni de las ambulancias”, resalta Zapata.

Varía la disponibilidad

Zapata señala que el número de ambulancias es “un tema dinámico que varía cada día” y destaca que hay algunas unidades que, debido al Covid-19, no pueden operar porque su personal está contagiado y debe ser reemplazado.

El funcionario indicó que de las 20 ambulancias que se registran como operativas, ocho pertenecen al MSP; aunque señaló que es preferible que sean las mismas instituciones las que den el detalle.

Al ser consultado, el Cuerpo de Bomberos dijo que tienen 10 ambulancias, la Cruz Roja cuenta con cuatro (tres que trabajan las 24 horas y una que labora 12). El IESS fue consultado, pero hasta el cierre de esta edición no dio el detalle.

Diariamente cada institución comunica al ECU-911 cuál es la disponibilidad de los vehículos.

Tres etapas

Según la norma internacional, un minuto y medio debe demorarse el operador para recoger una ficha y articular una emergencia. El tiempo de respuesta depende de diversos factores, como el tráfico o las distancias. “No es lo mismo un tiempo de respuesta en Riobamba que un tiempo de respuesta en Quito”, asegura Zapata.

El director menciona que el protocolo de articulación consta de tres momentos. El primero es recibir la llamada y tomar los datos. El segundo es recibir la emergencia y el tercero es despachar el recurso.

La competencia del ECU-911 corresponde a la primera fase. Por lo que el tiempo que tarde en llegar una ambulancia depende de las instituciones competentes.

Zapata resalta que la ambulancia puede demorar, pero siempre llega. “Quien decide que un caso, por un tema médico necesita una ambulancia, es la red de salud”.

El manejo de este protocolo fue consultado al IESS y al MSP; sin que obtengamos respuesta.

Carrasco, presidente de la Federación Médica Ecuatoriana, señala que los protocolos internacionales refieren que la ambulancia no debe tardar más de 30 minutos. “Pero no es así porque no tenemos condiciones, cada quién patea por su lado, cada quién se lanza la pelotita porque en el sistema no están claros ni los roles ni los protocolos”. Las directrices, recalca Carrasco, las tiene que establecer el MSP.

Unidades hospitalarias

El doctor Patricio Gavilánez, economista de la salud, indica que el déficit no es el único problema. Aunque no da un número, indica que la mayoría de ambulancias son de traslado, “que no son efectivas en el caso del Covid-19 o pacientes que están graves”.

Lo que requiere el país, añade, son ambulancias de tipo hospitalario, es decir, que cuenten con los equipos de una unidad de terapia intensiva.

Gavilánez, quien hace unos meses formó parte del MSP, indica que la institución desde antes de la pandemia tenía un déficit de al menos 18 unidades. En estos momentos, explica el galeno, adquirirlas es complejo por la demanda mundial que existe.

Carrasco detalla que el sistema de salud público ‘tambalea’, porque ninguna administración ha hecho caso a las asociaciones médicas, de abastecerse con el número necesario de insumos. “La emergencia sanitaria disparó una necesidad que lleva años sin solventarse”, agrega. (AVV)

“Quien decide que un caso, por un tema médico necesita una ambulancia, es la red de salud”. Juan Zapata, director ECU-911.

“Cada quién patea por su lado, cada quién se lanza la pelotita porque en el sistema no están claros ni los roles ni los protocolos”. Santiago Carrasco, presidente de la Federación Ecuatoriana de la Salud

FUENTE: LA HORA

La nueva estrategia verde de la Unión Europea genera dudas

Para la Unión Europea, la pandemia de COVID-19 no llegó solo con un replanteamiento filosófico sobre el desarrollo económico, sino con la decisión de acelerar la transición hacia una supuesta sostenibilidad alimentaria.

El eje de esta propuesta, parte del Pacto Verde Europeo, se llama ‘De la granja a la mesa’ y busca reducir el desgaste del suelo, la emisión de gases y el daño a los océanos a través de una serie de regulaciones, planteadas a diez años, que se debatirán en septiembre.

Estas incluyen la reducción del 50% del uso de pesticidas químicos, el 20 % de fertilizantes, el 50 % de antimicrobiales en cultivos acuícolas y un aumento del uso de suelo para la labranza de frutas y verduras orgánicas. También plantea la eliminación de empaques plásticos y la colocación obligatoria de información nutricional que incluya datos como el impacto climático de cada producto.

De aprobarse, la normativa no solo regirá para la Unión Europea, sino para las importaciones, lo que genera preocupación a los exportadores locales.

Así lo indicó Francisco Miranda, director de la Asociación Nacional de Exportadores de Cacao e Industrializados del Ecuador (Anecacao), quien explicó que, mientras que la producción cacaotera del país cuenta con un uso limitado de agroquímicos, hay dudas sobre lo que estas regulaciones implicarán para el costo de los cultivos. “El problema principal que vemos es que estas regulaciones también deben venir con un alza de precios para darle flexibilidad al agricultor para buscar soluciones. Sino es solo una imposición más que aumenta los costos a la producción agrícola”, dijo.

Este agregó que, en cuanto al uso de pesticidas, se debe tomar en cuenta épocas riesgosas como el fenómeno de El Niño o temporadas en las que aparecen plagas como la escoba de bruja. “Es necesario que el sector esté involucrado en la conversación que plantee el Estado porque somos los que conocemos las necesidades”, señaló.

Para la Federación Ecuatoriana de Exportadores, el país cuenta con una ventaja en caso de que se aprueben las regulaciones: la incursión que ya se ha realizado en el manejo de pesticidas en el país. “Los productos exportables ya cuentan con altos estándares de exigencia internacional en esta materia”, reflexionó Felipe Ribadeneira, presidente del directorio del organismo.

Aun así, este agregó que Fedexpor se encuentra revisando las implicaciones técnicas y de plazos antes de emitir un pronunciamiento oficial. “Vamos a ser muy cautelosos en asegurar que se preserve y valore nuestro esfuerzo productivo para impulsar más el acceso de nuestros productos al mercado europeo”, subrayó.

Desde la firma del Acuerdo Comercial Multipartes con la UE, las exportaciones del país han ido en aumento. El año pasado, Ecuador exportó $ 3.108 millones en 612 productos, acorde a datos del Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversión y Pesca.

Un 16,12 % de estas exportaciones correspondió al banano, otro sector que también tiene dudas sobre la propuesta ‘De la granja a la mesa’.

“En esta época (verano) se exporta más, pero a menor precio”, señaló el exportador José Núñez. “Para nosotros, en cambio, los costos aumentan por el tema del cuidado de la sigatoka negra y la producción baja. ¿Cómo se verá este escenario en el tema de precios con nuevas regulaciones?”, dijo.

Aun así los expertos recomiendan que, mientras el debate inicia en la UE, los exportadores se planteen los cambios propuestos. “Hay una tendencia hacia lo orgánico y eso exige una serie de retos para los productores(…) Ya no se podrá hacer negocios solo por cuestiones económicas, sino que se tendrá que considerar la sostenibilidad”, estableció Nicola del Valle, consultor de Asuntos Europeos para la agencia Atrevia.

Productores españoles piden garantías

Las dudas no solo provienen de Latinoamérica, sino desde la propia Unión Europea. El mes pasado, tres organizaciones agrarias españolas visibilizaron sus quejas contra la propuesta de la Comisión Económica.

La Federación de Asociaciones Agrarias Jóvenes Agricultores calificó la propuesta como “una grave amenaza” a la producción local e indicó que no se ha considerado el aumento en los costes ni la necesidad de reforzar el presupuesto. El gremio, al igual que los miembros de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos , también solicitaron que las normas y estándares se apliquen en la misma medida a las importaciones agrarias.

FUENTE: EL EXPRESO

En junio se contraen créditos de vivienda y consumo, pero suben los productivos

Los créditos en Ecuador bajaron en junio. De acuerdo con la Superintendencia de Bancos, la banca privada alcanzó una cartera de $28 892 millones a junio del 2020, lo que presenta una leve contracción de $102 millones en comparación con mayo 2020, representando una disminución porcentual del 0,35 %.

En medio de la pandemia, y tras varios meses de cuarentena, de todas maneras, la contracción es menor a la de los últimos tres meses y muestra una tendencia favorable. A fines de junio, la cartera bruta registra un incremento, esta vez de 1,5 puntos porcentuales en comparación con el mismo mes del 2019. Así lo informó la Asociación de Bancos Privados (Asobanca).

En el tema de cartera, pese a la contracción es interesante señalar que la comercial y productiva subió $93 millones en comparación con el mes pasado. En cambio, la cartera de consumo se contrae en $176 millones, y en lo que va del año consumo ha decrecido $440 millones. También el microcrédito se contrajo en $1 millón, vivienda en $9 millones y cartera automotriz tampoco presenta crecimiento.

En acumulado del 2020 (enero a junio), la cartera se ha contraído en $1137 millones, de los cuales $646 millones corresponden a cartera de empresas (comercial y productivo), lo cual es un indicador duro de la contracción del sector productivo.

Adicionalmente, junio registró un crecimiento de depósitos de $372 millones (1,12 %) más que en mayo de este mismo año. Asimismo, hubo un incremento de la liquidez a 28,8 %, 3,6 puntos porcentuales mayor en comparación con junio de 2019.

En este sentido, Asobanca considera que las cifras muestran una tendencia de recuperación positiva de los indicadores, pese a la cuarentena.

Tras haberse registrado en marzo y abril caídas de depósitos por $1035 millones, el aumento actual es una noticia positiva. El crecimiento en depósitos registra una variación anual de 6,1 % y un incremento mensual del 1,1 %.

Gonzalo Rueda, de la empresa consultora MarketWatch, coincide en que las cifras reflejan un escenario positivo. Sobre la liquidez explica que en junio hubo un aumento de 3,6 puntos, que representa una mayor confianza de la gente en el sistema financiero. Indica que en cuanto a los depósitos, Pichincha, Pacífico, Guayaquil, Internacional, Produbanco y Bolivariano presentan un aumento significativo en depósitos. Además recalca que en este mes ingresaron $280 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Entre tanto, MarketWatch señala que la morosidad del sistema en el primer semestre presenta un ligero deterioro cerrando en 2,8 %, levemente mayor a 2,7 % de diciembre de 2019.

Sin embargo, se puede observar que esta cifra de morosidad no presenta la realidad debido al refinanciamiento de cartera de consumo y microcrédito a 60 días. En este sentido, considera que el dato real se verá en el periodo de julio y agosto por el impacto de menores ingresos y empleo en la población, producto de la situación actual con menores ventas de las empresas.

La morosidad en hipotecario sí refleja el deterioro por la situación actual, ubicándose entre 6 % y 7 % en los últimos meses. (I)

FUENTE: EL UNIVERSO

Gobierno anuncia $20 millones en obras de mitigación por erosión regresiva del Coca

Un presupuesto de $20 millones invertirá el Ministerio de Energía y Recursos Naturales no Renovables para obras emergentes y de mitigación frente al fenómeno de erosión regresiva que continúa avanzando con fuerza en el sector del río Coca.

El avance de la erosión ha puesto en peligro todo un circuito de infraestructura estratégica, que incluye al Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) y al Oleoducto de Crudos Pesados (OCP), así como al poliducto Shushufindi-Quito, la carretera Lago Agrio-Quito y la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair.

Por ello, el miércoles pasado, el ministro de Energía, René Ortiz; el gerente de Celec EP, Gonzalo Uquillas Vallejo; y la viceministra de Hidrocarburos (e), María Elisa Soledispa, anunciaron la construcción de obras emergentes para disminuir la velocidad del caudal de agua del río Coca, mitigar el fenómeno de erosión regresiva «y así proteger la infraestructura estratégica que existen en el sector de San Rafael, límite provincial entre Sucumbíos y Napo».

Las obras, dijo el ministerio, costarían $20 millones y se ejecutarían en dos fases. En la primera, se han realizado ya consultorías para los estudios de la hidromorfología del río Coca y desde el 15 de julio se ejecutarán las obras emergentes, que consisten en la construcción de rampas de enrocado y ampliación del cauce del río, que permitirán disminuir la velocidad del caudal de agua y, de esa forma, mitigar el fenómeno de erosión regresiva. Los trabajos durarán 90 días.

La segunda fase se iniciará en agosto con la contratación del diseño de las obras definitivas y su ejecución arrancará en octubre del 2020. Estas consistirán en la construcción de puntos de control artificiales o puntos resistentes, mediante pantallas de inyección o pilotaje y se ejecutará en 240 días.

Las decisiones se tomaron tras recibir dos de los tres informes técnicos contratados con Celec EP. De los últimos recorridos que se han hecho en el sector, se conoce que ha habido un avance de la erosión de al menos 420 metros.

Petroecuador inicia construcción de tercera variante en menos de seis meses

Por otra parte, a fin de prevenir una posible afectación a la infraestructura petrolera existente en la zona, técnicos de EP Petroecuador iniciaron este 9 de julio la construcción de una nueva variante de la tubería del SOTE. Al momento, se cumplen labores de instalación de un sistema de obturación de la tubería a ser cambiada, lo que permitirá contener y evacuar 1000 barriles de crudo a través de cuatro tanqueros y de esta manera evitar una afectación ambiental.

Se trata de la tercera variante en menos de seis meses. La primera debió construirse cuando la erosión regresiva produjo la rotura de los tres ductos que se ubican en la zona: SOTE y poliducto Shushufindi-Quito (pertenecientes a la empresa pública) y el OCP. La segunda se hizo 1,5 kilómetros aguas arriba de ese punto. Ahora se deberá construir la tercera con una extensión de 786 metros, en un punto intermedio en el extremo suroriente del sector conocido como El Chicharrón, al borde de la vía E-45. Se tiene previsto que estos trabajos se realicen en 15 días.

La nueva variante estará distante entre 250 y 400 metros del límite del río Quijos (alto Coca), lo que permitirá prevenir posibles daños a la infraestructura del SOTE debido al avance de la erosión regresiva, dijo el ministerio.

Petroecuador cuenta con los insumos necesarios para realizar estos trabajos, como tubos suficientes para construir este nuevo trazado del oleoducto, con un diámetro de 26 pulgadas API 5LX60 de acuerdo con el diseño original del SOTE.

La petrolera pública coordinará también las operaciones necesarias para no afectar el suministro de crudo a las refinerías, así como tampoco a las ventanas de exportación de crudo. (I)

FUENTE: EL UNIVERSO

Condimentos, postres y comida rápida, entre los productos de mayor consumo pospandemia en Ecuador

En marzo pasado Andrea Garzón se preocupó por comprar vitamina C, frutas, vegetales. Quería fortalecer el sistema inmunológico de su familia ante la presencia del COVID-19. Sin embargo, tres meses después, al pasar de la etapa del confinamiento al distanciamiento y un poco más de apertura, la alimentación cambió. Dice que fue difícil controlar esas ganas de “picar”.

“La primera semana de pandemia mi esposo me decía tenemos que comer bien y estar protegidos; desayunábamos leche, pan, jugo. Después pasamos a comer empanadas, pasteles, sánduches, cosas golosas. Y también comenzamos a consumir galletas con leche. Pedíamos pizza, alitas, pasta, pan de chocolate. El estar encerrado te da ganas de comer eso”, afirma la quiteña de 34 años y madre de dos niños.

Esa es la tendencia de consumo pospandemia de acuerdo con las cifras de las empresas de delivery (entrega a domicilio) Glovo, Uber Eats y Kantar.

Glovo registra mayores entregas de snacks, postres y otros productos tradicionales, como pollo, hamburguesas, pizzas o comida china. “Esto quiere decir que el usuario prefiere adquirir productos que mejoren su ánimo. Hay una inclinación por comer algo rico, más que saludable”, indica Daniel Arévalo, gerente general de Glovo Ecuador.

Este cambio en el hábito de consumo de los usuarios del servicio de delivery muestra la inclinación por la llamada comfort food (comida confortable).

Uber Eats dice que también los helados han tenido mayor demanda en las últimas semanas y así lo corrobora el guayaquileño Giovanni Burgos, de 31 años. Dice que, en ocasiones, en su hogar se consumen donas y helados. “Los niños me piden que compre helados de litro para comer mientras ven televisión. Antes se lo hacía cuando uno iba a pasear, pero ahora no se puede”, asegura.

En la plataforma Uber Eats las categorías más buscadas son filetes de carne, papas fritas, pizza y hamburguesa.

Édgar Salas, director de Innovación de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES), dice que otros productos en mayor consumo son los cubos sazonadores, gaseosas y de higiene.

Cita al estudio de Kantar Food Print, que hace un análisis del consumo en Latinoamérica. Respecto de Ecuador, en la categoría alimentos prevalecen los cubos sazonadores y el atún enlatado; en bebidas, gaseosas y café; en lácteos, leche y bajó el consumo de yogur; y en cuidado personal se mantiene el detergente. Salas cree que el yogur disminuyó por cuestiones de precio.

Menciona que en esta situación la elección va ligada al costo. “Es más barato comprarse un arroz con menestra y pollo frito a $2,15 que una ensalada César a $4,50, entonces siguiendo esa premisa la comida sana es más costosa que la que no tiene todos los nutrientes”, expresa.

Almacenes Tía registra el 38,5 % de adquisición en productos de lavado de ropa, 32,9 % en condimentos, 30,4 % en aceites, 29,3 % en jabones, 29,2 % en pescado en conservas, 29 % endulzantes, 28,1 % en galletas de dulce. Además, señala que la presencia de clientes aumentó el 20 % luego del paso al semáforo amarillo en Guayaquil.

“Durante el confinamiento hubo una para de los consumos que tradicionalmente se venían haciendo y que ahora con los cambios de semáforo hemos vuelto a la nueva normalidad”, dice Salas.

Con esto concuerda Jheovany Mejía, director ejecutivo de Eureknow, empresa de investigación de mercados y estudios del consumidor, quien menciona que se opta por combos o productos con mayor rendimiento.

“El consumidor comienza a buscar promociones, productos en descuento de tal manera que el presupuesto con el que cuenta lo pueda estirar lo más posible. (…) Y compra los productos más baratos y que sean de primera necesidad, como harinas, arroz, granos secos. No se compra tanto enlatados porque el presupuesto ha caído”, menciona.

Katherine Guerra, vocera nutricionista de Siluet y Bonna Vit, considera que sí hay un grupo de personas que mantiene el cuidado de su alimentación y se inclina por productos con nutrientes, aunque las cifras no lo demuestren.

“Es innegable que el factor económico determina al escoger ciertos alimentos, los carbohidratos por lo general son más asequibles y económicos, y tendemos a mezclar dos tipos de estos en un solo plato, olvidándonos del aporte de frutas y vegetales variados. A pesar de eso, considero que sí hay mayor concientización en la población acerca de cuidar nuestra alimentación para evitar la hipertensión, diabetes, entre otros”, expresa.

Según un estudio de Eureknow, el 49 % prefiere realizar compras digitales por ahorrar tiempo y seguridad; el 39% opta por el método presencial y el 20% no tiene acceso a compras online.

Gasto y percepción

$200 máximo de consumo

El 40,3 % de 497 personas consultadas, a través de redes sociales y correo electrónico, indicó que el gasto promedio es entre $101 y $200 por quince días. El 29,5 %, entre $201 y $400. Mientras que 21,2 % hasta $100, el 6,4% de $401 a $800 y el 2% prefirió no responder, de acuerdo a la encuesta de Oikonomics de junio. Así también el mayor consumo es en supermercados con el 61,5 %; tiendas del barrio, 29,3 %; servicio de delivery, 6,3 % y el 2,9 % prefiere acudir a los mercados municipales.

Cambios en dos vías

David Gutiérrez, consultor sénior de Oikonomics, dice que los cambios en el padrón de consumo van dos por vías: frecuencia de compras de productos de la canasta básica y de limpieza, y preferencia de compras de adquisición y calidad menores.

“Si antes esos productos se compraban una vez al mes, ahora se lo está realizando dos o tres veces en el mismo periodo. Y sobre lo otro, posiblemente están comprando la misma canasta de productos, pero hay una sustitución de marcas ligada a buscar precios menores”, indica.

Actitudes en compras

Un estudio de Eureknow analiza las barreras y motivaciones frente a las compras online. Como parte de las barreras, el 33 % cree que las compras online no son seguras, el 29 % no confía en las compras online porque no las puede ver y tocar; y el 28 % piensa que son caras. Mientras, en la parte de motivación, el 37 % prefiere las compras vía digital; al 28 % le parece cómodo y el 27 % lo hace por seguridad.

Periodicidad

Almacenes Tía menciona que antes de la pandemia llevaban en promedio 7,48 productos por fact aura. Durante el confinamiento fue de 13,64 productos por cliente; y actualmente se ha estabilizado a 9,50 por factura. La forma de pago más utilizada ha sido el efectivo con 78,19 %, crédito 9,25 % y débito 8,23 %. (I)

FUENTE: EL UNIVERSO

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