El consumo de este tubérculo es popular en el país debido a su tradición, además Ecuador alberga 580 variedades de papa, siendo las más comunes la Chola, Gabriela y Chaucha.
La cadena productiva de la papa se ha extendido de tal manera que aproximadamente 80 mil agricultores se dedican a su cultivo y comercialización, generando un 56% de cosecha a nivel nacional, de acuerdo a datos del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
A su vez, en julio de 2022 el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIAP) desarrolló y presentó dos nuevas variedades del tubérculo denominadas, papa SuperFri y la cebada Alfa 2021.
Conforme a un boletín de prensa emitido por la empresa BASF, la producción de papa en Ecuador no solo constituye una fuente importante de alimentos debido a su alto nivel nutricional, sino que también impulsa los flujos económicos y sociales en las zonas productoras, ya que alrededor de 80,000 agricultores están involucrados en el cultivo de papa, y aproximadamente el 81% de la producción se destina al consumo en fresco, mientras que el resto se utiliza para procesamiento industrial.
A pesar de su relevancia, los agricultores enfrentan desafíos para administrar sus tierras de manera rentable, como la reducción en la disponibilidad de productos para combatir la creciente resistencia de plagas y enfermedades.
Uno de los principales hongos que afectan al cultivo de papa es la roya, atacando a las hojas y tallos de la planta y, en etapa de avance, llega hasta los tubérculos, reduciendo los rendimientos y causando pérdidas económicas.
Frente a esto, BASF se ha enfocado en brindar soluciones desde el momento de la siembra hasta lograr un cultivo rentable y productivo, ofreciendo soluciones como Melyra con Revysol, un fungicida sistémico translaminar, de amplio espectro el cual cuenta con beneficios de tener una acción preventiva, además de ser una herramienta antirresistencia por sus dos mecanismos de acción.
“Los agricultores buscan soluciones innovadoras y sostenibles que les permitan mejorar sus operaciones agrícolas. En BASF, nos ponemos en las botas de los agricultores, para junto con ellos, lograr la experticia en productividad y así cultivar ganancias», dijo Teófilo Bustingorri, Gerente de país de la división de Soluciones para la Agricultura de la empresa antes mencionada.
Fuente: El Productor