Cerca de 500.000 nuevas personas accedieron a productos financieros en 2018. El acceso a crédito se elevó un 30 %.
El año pasado, 486.397 nuevos ecuatorianos accedieron a un producto financiero en el país, según el último reporte de inclusión financiera del Banco Central del Ecuador (BCE), publicado ayer.
Al cierre de 2018, en total 6,8 millones de ecuatorianos accedieron a algún servicio financiero. Es decir, el 57,6 % de la población adulta forma parte del sistema financiero nacional, que incluye bancos privados, cooperativas de ahorro y crédito de los segmentos 1, 2, 3 y 4, mutualistas, BanEcuador y la Corporación Financiera Nacional (CFN), de acuerdo con el informe emitido por el BCE.
Una de las variables que crecieron el año pasado fue el crédito. Al cierre del año pasado, 571.567 personas más accedieron a préstamos directos en las entidades financieras (no incluye tarjetas de crédito). Es decir, el acceso a crédito se elevó un 30 % frente a 2017. Sin embargo, la tarea pendiente, tanto para el Gobierno como para las entidades bancarias y de la economía popular y solidaria, está en el 42,4 % de la población que aún se mantiene ajeno al sistema financiero.
En junio de este año, el Banco Mundial (BM) y el BCE emprendieron un programa de asistencia técnica para mejorar la inclusión financiera en el país. El Central informó que está ejecutando una estrategia para fortalecer el marco regulatorio existente y la supervisión del sistema cooperativo y microfinanciero, para que más ciudadanos tengan acceso a los servicios financieros en Ecuador.
En ese entonces la gerente del BCE, Verónica Artola, aseguró que en el país el 51,2 % de la población tiene acceso a una cuenta en el servicio financiero nacional. Si bien el porcentaje está dentro del promedio de la región, las autoridades manifestaron que el objetivo es incrementar la participación de los ecuatorianos en bancos y cooperativas. “Hay un mercado cautivo muy importante que podemos trabajar”, dijo Artola.
Para empezar, la banca, el BCE y el BM delimitan una línea base para diseñar una estrategia que determinará qué productos son los más beneficiosos para las personas que actualmente no acceden a una cuenta de ahorros o un crédito.
La Billetera Móvil (BIMO), que se prevé será lanzada en estos días al mercado, buscará ser un mecanismo de inclusión financiera. Los usuarios que se bajen la aplicación podrán acceder a cuentas básicas.
FUENTE: DIARIO EXPRESO (EC)