Las ventajas e inconvenientes de compartir la cama con el perro

Muchas veces los perros de la casa prefieren dormir en la cama de sus propietarios que en las asignadas para ellos. Pero ¿es recomendable compartir este espacio con las mascotas?

«Depende de la situación», dice el veterinario británico Jo de Klerk. «Se ha demostrado que los perros en la cama fortalecen su vínculo y ayudan a inducir la relajación y disminuir la ansiedad», detalla el experto al portal Mic.

»La cercanía a un perro ayuda a reducir la presión arterial, aliviar el estrés y disminuir la ansiedad o la depresión», estima la veterinaria Claudine Sievert radicada en Kansas (EE. UU.). Esta experta asegura que acurrucarse con un perro libera oxitocina, llamada «la hormona del amor», en el cerebro.

Sarah Ochoa, veterinaria y consultora de DogLab, una base de datos informativa para amantes de los perros, indica que »la mayoría de los perros que duermen con sus dueños son más leales y están más unidos a la persona con la que duermen». «Permitir que su perro duerma en su cama fortalece la dinámica con las mascotas», agrega.

Si se opta por dejar por compartir la cama con la mascota, se deberá tomar cierta precaución. Por ejemplo, cuando se saca al can a la calle, este podría recoger un alto volumen de motas de polvo o polen, y si su dueño es alérgico a este tipo de sustancias entonces sería un gran problema, indica El Confidencial. En todo caso si esto ocurre lo mejor será entrenar a la mascota para que no se suba a la cama de su humano.

Por otra parte Carlo Siracusa, veterinario y director de etología animal en Penn Vet en Filadelfia (EE. UU.) señala en el New York Times que algunos perros quizá no deban estar en la habitación, como los cachorros o los perros ancianos que probablemente no duerman durante toda la noche, los perros enfermos o los que por ser nerviosos podrían volverse agresivos cuando se asustan o se despiertan de súbito.

Además, si un nuevo bebé llega a la familia y va a dormir en la misma habitación que sus padres, dijo Siracusa, tal vez ya no sea un buen lugar para que el perro pase la noche, no porque el can pueda asfixiar al bebé, sino porque el espacio puede ser un problema con tantos cuerpos humanos y peludos en un solo dormitorio. (I)

Fuente: Diario el Universo (ec)

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