Empresa rusa paraliza obras en hidroeléctrica Toachi Pilatón por controversia con Celec

La rusa Tyazhmash solicitó la suspensión total de sus obras en Toachi Pilatón, por controversias con la estatal Celec, lo que supone un nuevo revés para el proyecto que ya lleva 13 años de construcción.

Nuevos conflictos enfrenta el proyecto hidroeléctrico Toachi Pilatón, que es el más costoso del país y que lleva en construcción casi 13 años.

Esta vez la controversia es entre el holding estatal Corporación Eléctrica de Ecuador (Celec), propietaria del proyecto, y la empresa rusa Tyazhmash, encargada de una tarea clave del proyecto como es la instalación de los equipos electromecánicos en Toachi Pilatón.

Es decir, de instalar turbinas, compuertas, válvulas, para el funcionamiento de la hidroeléctrica.

Mediante un oficio fechado el 21 de marzo de 2024, la empresa rusa Tyazhmash solicitó a Celec la suspensión total de sus actividades en Toachi Pilatón, por falta de acuerdos con el holding estatal.

Eso supondrá una nueva paralización del proyecto hidroeléctrico, que tiene más de una década de retrasos. El origen de la disputa El origen de la disputa de Tyazhmash está en que las obras civiles inconclusas de Toachi Pilatón.

Y es que Celec no ha podido terminar las obras civiles pendientes que dejó la constructora china CWE, tras la terminación unilateral de su contrato en marzo de 2022 para la construcción de la obra civil del complejo hidroeléctrico, por supuestos incumplimientos.

Al no haberse terminado las obras civiles, no se ha podido instalar los equipos electromecánicos en el plazo establecido en el contrato firmado con Celec el 20 de junio de 2019, argumenta Tyazhmash en su comunicación a Celec.

De hecho, el plazo original del contrato de Tyazhmash era de 880 días, es decir, de dos años y cinco meses. Como las obras civiles no concluían, Celec incluso extendió el contrato de Tyazhmash por dos años y casi cuatro meses adicionales, a través de la firma de dos adendas modificatorias. Pese a la prórroga, en ese tiempo tampoco concluyeron las obras civiles necesarias.

La última prórroga se cumplió el 28 de marzo de 2024. De hecho, recién en octubre de 2023, Celec contrató al Cuerpo de Ingenieros Civiles del Ejército para que concluya las obras civiles pendientes que dejó la empresa china CWE, lo que está previsto que ocurra a finales de 2024.

Tyazhmash sostiene que todas estas demoras ha provocado «afectaciones al equilibrio económico del contrato (…) que fueron debidamente notificadas en agosto de 2022», pero que no fueron atendidas.

Antes de solicitar la suspensión total de sus actividades y ante la cercanía de la fecha de finalización de su contrato, la empresa rusa había solicitado a Celec en varias ocasiones una nueva prórroga, pero no recibió respuesta. El último pedido de prórroga se presentó el 1 de marzo de 2024. Además, está de por medio un proceso de mediación solicitado por la empresa rusa.

Sin embargo, la quinta reunión de mediación se realizará por pedido de Celec recién el 1 de mayo de 2024, más de un mes después de que fenezca su contrato. «Tyazhmash reitera su predisposición para encontrar acuerdos entre las partes que posibiliten una solución a los temas pendientes», dijo la empresa rusa en su comunicación.

Un “rosario” de problemas Desde que arrancó su construcción en mayo de 2011, el Toachi Pilatón ha registrado más de un tropiezo.

Uno de ellos surgió con la empresa rusa Inter Rao que era la encargada de las turbinas, los generadores, las compuertas, las válvulas y otros equipos electromecánicos de esta hidroeléctrica.

Pero la contratista dejó esta obra en marzo del 2017, luego de que el entonces presidente de Rafael Correa ordenara a Celec la terminación unilateral del contrato, debido a supuestos retrasos injustificados en la entrega de la obra. Frente a eso, Inter Rao presentó un arbitraje internacional en contra de Celec. El tribunal le dio la razón a esta empresa y ordenó a Celec el pago de USD 45 millones, que fue apelado por el holding estatal.

A esa disputa se sumaron querellas en cortes locales presentadas por la empresa china CWE, encargada de las obras civiles, a la que Celec terminó su contrato, como dijimos antes, en marzo de 2022. La disputa con CWE surgió luego de que la Contraloría General del Estado advirtiera de fallas en las obras civiles del complejo hidroeléctrico Toachi Pilatón.

Entre las principales fallas están:

Falta de impermeabilización de la presa Toachi.

Deslizamientos de tierra en la chimenea de equilibrio superior de la central de Alluriquín.

Fisuras en el túnel de conducción de agua Toachi Alluriquín.

Un costo millonario El complejo hidroeléctrico Toachi Pilatón está ubicado entre las provincias de Pichincha, Santo Domingo de los Tsáchilas y Cotopaxi. La central tendrá una potencia total instalada de 254,4 megavatios, una vez concluyan las obras.

Este complejo hidroeléctrico está compuesto por tres centrales. Alluriquín, de 204,4 megavatios.

Sarapullo, de 49 megavatios. Y la minicentral Toachi, de 1,4 megavatios. De esas, solo la central Sarapullo, de 49 megavatios de potencia, ha entrado en operación hasta ahora.

Lo hizo en marzo de 2023. Hasta septiembre de 2023, el costo de la obra ya suma un costo de USD 912 millones.

Fuente: Primicias EC

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