EE.UU. reanudó negociaciones sobre comercio con China

El asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow, señaló que hay ninguna certeza de que China cederá a las demandas estadounidenses en las negociaciones comerciales China y Estados Unidos

Las conversaciones entre las dos naciones han avanzado poco desde mayo, cuando Trump puso fin a un acuerdo que habría llevado a China a comprar más energía y productos agrícolas para reducir el déficit comercial

Estados Unidos y China reanudaron el contacto «a todos los niveles» sobre el comercio antes de una reunión planificada entre el presidente Donald Trump y Xi Jinping de China, dijo el asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow.

No hay ninguna certeza de que China cederá a las demandas estadounidenses en las negociaciones comerciales, pero «es mejor hablar que no hablar», dijo Kudlow en una entrevista en CNBC el martes.

«Estamos hablando con ellos de nuevo», dijo. «Estamos teniendo comunicaciones a todos los niveles de los gobiernos de EE.UU y China» para prepararnos para la cumbre de líderes del Grupo de los 20 en Argentina, que tendrá lugar del 30 de noviembre al 1  de diciembre. Kudlow agregó que no haría una predicción sobre el resultado de las negociaciones.

El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, y el viceprimer ministro chino, Liu He, hablaron por teléfono el viernes, de acuerdo con personas informadas sobre el tema, quienes solicitaron no ser nombrados debido a la sensibilidad del asunto. La conversación no arrojó ningún resultado concreto, dijeron las fuentes. South China Morning Post, con sede en Hong Kong, informó que se esperaba que Liu pronto visitara Washington. La conversación telefónica fue posterior a una llamada entre Trump y Xi hace dos semanas, la primera llamada divulgada públicamente en seis meses.

Las acciones estadounidenses tuvieron dificultad para mantener las ganancias iniciales el martes luego de que los precios del petróleo se desplomaron, justo cuando aumentaban las esperanzas de progreso en la disputa comercial ente EE.UU. y China.

Las conversaciones entre las dos naciones han avanzado poco desde mayo, cuando Trump puso fin a un acuerdo que habría llevado a China a comprar más energía y productos agrícolas para reducir el déficit comercial. En Pekín, la medida de Trump fue vista como un insulto para Xi, quien envió a Liu a Washington a negociar, y se consolidó la visión de que el objetivo real de Trump era frustrar el ascenso de China.

«Estamos dispuestos a negociar con EE.UU.», dijo el primer ministro chino, Li Keqiang, en un evento celebrado el martes en Singapur, y agregó que las conversaciones deberían llevarse a cabo sobre la base del respeto mutuo, el equilibrio y la buena fe. Dijo que confiaba en que China y EE.UU. tienen la sabiduría para «poder encontrar una solución que sea aceptable para ambas partes».

Si bien Li reconoció que China y EE.UU. tenían disputas en áreas distintas al comercio, dijo que esos desacuerdos también podrían solucionarse con diálogo. «Siempre que respetemos los intereses fundamentales y las principales preocupaciones de cada uno, podremos contener y resolver las disputas», dijo Li.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios por fax sobre la llamada.

Las dos naciones han impuesto varias rondas de aranceles a las mercancías del otro, y los aranceles aplicados a las importaciones chinas de US$200.000 millones debieran aumentar a un 25 por ciento a partir de enero, si no hay un avance en las negociaciones.

En un discurso ante un grupo de expertos de Washington el viernes, Peter Navarro, un asesor comercial de la Casa Blanca que es abiertamente uno de los de línea más dura de la administración frente a China, advirtió a los banqueros de «Wall Street» que no se involucren en la diplomacia itinerante con Pekín. En una carta –cuyo contenido es escasamente conocido– a Mnuchin y otros defensores de una solución negociada, también dijo que nadie, excepto Trump o Robert Lighthizer, el representante comercial de EE.UU., debería estar negociando con Pekín.

Kudlow dijo el martes que Navarro no estaba hablando en nombre de Trump y que la Casa Blanca no le había autorizado a hacer esas declaraciones.

La administración de Trump ha dicho que quería una respuesta sustancial a una larga lista de demandas para lo que llama cambios «estructurales» en la política industrial china. Trump ha rechazado una serie de acuerdos negociados por asesores como Mnuchin y el secretario de Comercio EE.UU., Wilbur Ross, que se centraron en aumentar las compras en lugar de realizar reformas sustanciales.

FUENTE: DIARIO EL COMERCIO (PE)

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