La palma aceitera es uno de los principales cultivos agroindustriales del Ecuador, fuente de empleo y desarrollo en las regiones de la Costa y Amazonía. Con más de 300 mil hectáreas cultivadas, el país se ubica entre los mayores productores de aceite de palma en América Latina, siendo un pilar clave para la economía agrícola nacional.
En este contexto, el sector cierra el año con resultados alentadores. En diálogo con Diario El Productor, Carlos Chávez, presidente del Directorio de ANCUPA (Asociación Nacional de Cultivadores de Palma Aceitera), destacó que 2025 ha sido un año de recuperación y buen desempeño para los productores.
“Ha sido un año bueno para la palma. La presión de la enfermedad del cogollo ha disminuido considerablemente y no se han perdido plantaciones importantes. Además, hemos visto un crecimiento en las nuevas siembras con materiales mejorados”, señaló Chávez.
De acuerdo con el dirigente, la producción nacional alcanzará alrededor de 620 mil toneladas de aceite rojo de palma, acercándose a los niveles registrados en 2019, antes del fuerte impacto de la enfermedad.
Las exportaciones también se mantuvieron activas durante casi todo el año, con apenas un mes sin despachos. “Nos estamos acercando nuevamente a los números de 2019, y los precios internacionales nos han acompañado, lo que ha permitido un desempeño positivo”, explicó.
Chávez añadió que el sector ha retomado su ritmo productivo luego de los años más difíciles, gracias a la recuperación de plantaciones afectadas. “No hemos aumentado las áreas de siembra, pero los palmicultores están resembrando las zonas que fueron dañadas. Eso nos da una proyección optimista para los próximos años”, aseguró.
De cara al 2026, las expectativas apuntan a superar las 700 mil toneladas de aceite rojo, impulsadas por la recuperación de las zonas afectadas y la reactivación del sector.
Uno de los principales proyectos para el futuro inmediato es la implementación del biodiésel en Ecuador. “Estamos trabajando con el Gobierno Nacional para desarrollar este nuevo mercado. Países como Colombia, Perú e Indonesia ya lo usan de manera regular, y Ecuador no puede quedarse atrás”, subrayó.
Con la replantación en marcha y nuevas oportunidades en el horizonte energético, el sector palmicultor consolida su recuperación y reafirma su papel como motor del agro ecuatoriano, expreso el dirigente.
Fuente: El Productor


